Escribe Vanessa Rolfini (IG @rutasgolosas) / Fotos Portada Netflix

La nueva serie gastronómica protagonizada por Michelle Obama y los títeres Waffles y Mochi, en principio es para niños, pero está llena de ingredientes, recetas, métodos de cocción y enseñanzas para la vida. Perú con algunos de sus productos bandera, participa en los capítulos dedicados a la sal, la papa, los huevos y el maíz.

Waffles y Mochi son dos aspirantes a chefs que viven en el frío país de los helados llamado Comicongelandia. Un día decidieron lanzarse a la aventura y llegaron al supermercado de la señora Michelle Obama, donde obtienen un trabajo a pesar de no tener experiencia, pero sí mucho entusiasmo. Así comienza esta historia de 10 capítulos que nos llevará a aprender todo lo necesario sobre ingredientes, métodos de cocción, nuestra vinculación con la comida, la relación con los otros y a conocernos mejor a nosotros mismos.

Se trata de una travesía muy divertida y educativa que viaja por las ciudades, restaurantes y productores de Portugal, Italia, Japón, Corea del Sur, Uganda, Estados Unidos y Perú. Waffles es un personaje entusiasta, que proviene de la unión de un waffle y una Jeti, a quien la titiritera Michelle Zamora le da vida. Mientras que a Mochi, un tradicional pastel de arroz japonés, le da voz y movimiento Russ Walko. Una serie creada por la educadora y actriz Erika Thormahlen y el guionista Jeremy Konner. Inevitable que a varias generaciones no recuerde a los Muppets o Plaza Sésamo, donde cada personaje, títere o humano, es una fuente inagotable de enseñanzas formales e informales, en este caso, enfocadas en la gastronomía.

Aunque hay muñecos, un lenguaje colorido y sencillo no es una producción que se limita a los niños, en realidad, hay información para todos, porque explican magníficamente desde cuál es el punto de sal, o por qué el tomate es una fruta, o qué hace tan increíble a una papa, cómo las hierbas y especias le dan color a la vida o la transformación en frío que hacen las bacterias cuando fermentamos la comida, entre tantos temas.

En cada capítulo, no hay forma que quedemos indiferentes y constantemente sentiremos que descubrimos información valiosa sobre lo que nos llevamos a la boca y sus circunstancias. La serie de Waffles y Mochi está llena de detalles que queremos hacer notar y algunas recomendaciones que van más allá de la pantalla.

10 CAPÍTULOS, ¿POR DÓNDE COMENZAR?

Lo ideal es ver todos los capítulos, pero no hay que disfrutarlos necesariamente en orden. Comiencen por el dedicado al tomate, que es el primero de la serie, porque explica el origen de la historia y cómo llegan Waffles y Mochi a la tienda. Pero podemos luego escoger los ingredientes que más nos llamen la atención: sal, arroz, papa, maíz, huevos, encurtidos, hierbas y especias y agua.

Algunas recomendaciones para empezar son: el capítulo dedicado al arroz, donde Mochi descubre la importancia de los ancestros; el centrado en las hierbas aromáticas y especias, que le dan color a la vida; al que le puede seguir el dedicado a sal, que nos vincula con los sabores; o el del agua, escencial pero que pocos consideran como un ingrediente. Y, obvio, el de la papa, al cuál seguramente se lanzarán de inmediato. En este capítulo se enseña a no juzgar por las apariencias. Como dato curioso, el capítulo del agua, que cierra la serie, se mezcla con la historia de la serie Stranger Things, y hasta aparece el actor Maten Gatarazzo, en su papel de Dustin Henderson.

PERÚ EN PRIMERA FILA

Perú, algunos de sus productos, platos y costumbres aparecen en cuatro capítulos. En el dedicado a las papas, el productor Manuel Choqque muestra la diversidad de las papas nativas, y luego la chef Pía León y su hijo Cristóbal les cuentan a los protagonistas cómo se hace la huatia y cómo pueden usar la papa en la receta de este link. Luego en el capítulo dedicado a la sal, visitan Maras, donde les explican cómo se extrae el mineral y cómo forma parte de la tradición del lugar.

Otro de los capítulos es el dedicado a los huevos, donde visitan el mercado de Urubamba y allí prueban los huevos de codorniz y, finalmente, en el episodio dedicado al maíz, viajan a Lamay, donde se sorprenden con el maíz morado y prueban la mazamorra.

Pía León cuenta que no dudó en participar porque se sintió identificada con la idea de enseñar a los niños lo que significa una alimentación saludable, hacer del momento de la comida una ocasión divertida, cuando no solo se aprende sobre el producto sino a compartir con la familia. “Es un viaje para conocer las distintas culturas, sus productores. Cristóbal participó y se divirtió haciendo la huatia. Luego hicimos su plato favorito que es el locro, pero con papas y los productos de la zona. Queríamos mostrar un plato colorido, saludable, distinto y rápido”. Foto: Netflix.

PARA COMENTAR Y APRENDER

Cada capítulo tiene tres ejes que se entrelazan, para empezar el ingrediente que lo protagoniza del cuál se cuenta de dónde viene, su historia, sus usos y las maneras de cocinarlos o prepararlos.

Luego Waffles y Mochi se ven involucrados en todo tipo de situaciones, entonces aprenden lecciones como la importancia de pedir ayuda cuando es necesario, la paciencia en la cocina, no juzgar por las apariencias, el ser tolerantes con nuestros errores, el respeto a la naturaleza, trabajar en equipo, la sana competencia, entre muchos temas.

Finalmente, son los niños quienes toman la voz en cada capítulo y nos das sus impresiones sobre cada producto, resultando fascinante. Como para preguntarle a los nuestros en casa qué opinan o cómo ven lo que diariamente se llevan a la boca.

NO TODO ESTÁ EN NETFLIX

El programa tiene una fuerte presencia en redes sociales, especialmente en Instagram y Facebook, donde semanalmente resaltan aspectos de los episodios, recuerdan datos importantes y dan recetas. Se pueden ver videos con algunos de los personajes famosos de la serie preparándolas, entre las que destaca la propia Michelle Obama.

DATOS CURIOSOS

• Participan chefs famosos como Massimo Bottura, José Andrés, Pía León, Samin Nosrat, Bricia López, Preeti Mistry, Hamed Ahmadi, Mashama Bailey, entre otros.
• Consultan científicos, historiadores y escritores, como Momoko Nakamura,
• Tomen nota de los restaurantes, mercados y productos que visitan.
• La exprimera dama estadounidense, Michelle Obama, muchas veces es mencionada como la Sra. O.

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