EN LA TRATTORIA DON VITO LA BUENA MESA HA SIDO UN ASUNTO FAMILIAR POR 40 AÑOS

Durante cuatro décadas esta trattoria ubicada en Miraflores ha servido clásicos de la cocina italiana con un innegable toque peruano. La celebración además de platos especiales, incluye cócteles y conciertos de música de cámara.

Cuando un restaurante celebra 40 años, entonces, habla también de la historia de su entorno o de la ciudad en la que se ubica, por lo que la Trattoria Don Vito es parte de Lima, un clásico entre locales que se han sentado a su mesa a disfrutar pastas, pizzas y especialidades, principalmente, italianas. Para la celebración ha incorporado a la carta platos como paglia e fieno a la romana, coniglio alla cacciatora, spaghetti alla Calabrese y spaghetti nero di sepia, a lo que se suman conciertos de música de cámara que se llevarán a cabo en los próximos tres meses.

La trattoria está en manos de la familia Hundskopf desde 1981, cuando Miguel y su esposa Alice tomaron un traspaso. Lo que era un lugar modesto cerca del Parque Reducto en Miraflores, con los años ganó en tamaño y en la variedad de su menú. Los esposos Hundskopf no son de origen italiano, pero combinan el gusto por la restauración con la música. Cuatro décadas después, Don Vito cuenta con una comunidad de clientes fieles por generaciones. Javier Hundskopf cuenta que “la pasta se hace respetando la tradicional receta italiana de harina de trigo especial y huevos frescos”, a lo que se suman recetas con largas cocciones al horno, antipastos, entre otras delicias, algunas preparadas frente a los comensales. Además agrega, “Don Vito es una trattoria con tradición que ha logrado mantener la calidad, ha crecido, refinado su propuesta, un ambiente acogedor y se ha destaca por su buen servicio”.

LO DE SIEMPRE, ¡POR FAVOR!

Algunos clásicos de Trattoria Don Vito llevan hasta tres décadas en la carta. Miguel Hundskopf, también propietario y segunda generación familiar, afirma que “aquí tienen sentido y es común escuchar clientes que le dicen al mesero: lo de siempre”. Entre sus especialidades más conocidas está el póker de pastas, que agrupa en un solo plato cuatro tipos de pastas con cuatro salsas, a eso se suma la canilla de cordero, el espagueti con pato ahumado, los canelones rellenos de cordero en salsa de cerveza negra, los fetuccini frutti di mare, entre muchos otros, incluso algunos platos le hacen un guiño a la culinaria peruana, como el lomo saltado y el cabrito a la Norteña.

Otro de los aspectos que llama la atención es que tiene la opción allá sua presenza, es decir, preparan algunos platos frente a los ojos de los comensales, llevan un carrito que tiene una cocina con dos estufas y todo lo necesario para que la experiencia sea más estimulante aún. Así se pueden pedir las crepes suzette, las fresas a las dos pimientas y toda suerte de frutas salteadas y flambeadas.

AFINANDO EL OÍDO Y EL PALADAR

“Don Vito está estrechamente relacionado al desarrollo de la música clásica en el Perú porque mi padre es un gran amante de los autores clásicos y los espacios de la trattoria además de conciertos, han sido escenario para artistas e intelectuales. Nuestro restaurante, muchas veces ha sido casi una sala de ensayo de destacados músicos, que prueban sus rutinas, ejecutan sus partituras favoritas y pueden ver la reacción del público”, expresa Javier Hundskopf.

Uno de los aspectos que también destaca en la Trattoria Don Vito es su carta de cócteles, donde se puede apreciar una cuidada y estudiada cronología de clásicos mundiales, una labor de curaduría llevada a cabo por Javier Hundskopf, entusiasta del tema y que se asegura que cócteles, vinos, cervezas y licores propios, como aperitivos o digestivos, estén presentes y enriquezcan la experiencia del comensal. La celebración combinará entonces los especiales de la carta, conciertos y una carta de cócteles para celebrar 40 de buena mesa. Para ver las fechas de los eventos, pueden seguir sus redes sociales IG @trattoria.donvito.

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