El TrinchePERÚ ARRASÓ CON OROS EN EL CONCURSO INTERNACIONAL CATAD’OR 2025

Escribe Soledad Marroquín M. (IG @sol_marroquin)

Mientras en el Perú aún persisten dudas sobre la calidad del vino nacional, su avance no se detiene, especialmente en la recuperación y producción de vinos con nuestras variedades patrimoniales y criollas. Ese esfuerzo ya trasciende fronteras con 28 medallas de oro obtenidas en el Catad’Or World Wine Awards 2025 en Santiago de Chile.

Nacido en 1995 en Chile, Catad’Or cumple este año su 30^a edición. Este concurso es considerado el más antiguo de América del Sur, se enfoca en la producción de la región y cuenta con el respaldo de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), la Federación Mundial de Grandes Concursos Internacionales de Vinos y Licores (Vinofed) y la Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos de Chile.

Nuestras regiones vitivinícolas más clásicas e históricas como Lima, Ica, Arequipa, Moquegua y Tacna, reconocidas desde siempre como regiones pisqueras, participaron con 81 muestras de 19 bodegas que se midieron entre 1350 etiquetas de 16 países competidores. Estas fueron evaluadas por 110 jueces internacionales de 18 países.

Las 28 medallas de oro (el puntaje para lograr esta categoría debe ser entre 89 y 92.9 puntos) están distribuidas entre Lima (5), Ica (5), Arequipa (3), Moquegua (5) y Tacna (10). Arequipa y su Conde de la Conquista Rosado de Moscatel Negro del Perú 2025, elaborado por la bodega Paz-Soldán, logró 91.17 puntos, obteniendo la calificación más alta entre los vinos peruanos y un reconocimiento especial por ello. Otro record lo marcó Raíces Negras, de la bodega Viña D’Los Campos de Cañete, que consiguió presea de oro para los cinco vinos que inscribió en el certamen.

Es importante resaltar que de las 81 muestras peruanas, 40 son vinos elaborados con uvas patrimoniales: Quebranta, Negra Criolla, Moscatel de Alejandría, Torontel, Moscatel Negro del Perú y Uvina. Los otros 41 vinos son de Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc, Malbec, Petit Verdot, Carmenere, Tannat y Syrah.

Estos logros no son un hecho fortuito. Son el resultado de un trabajo enfocado y hasta reivindicativo de la vitivinicultura peruana gracias al esfuerzo de las familias que se encuentran trabajando día a día en el viñedo y en la bodega. Cabe resaltar también que la creciente participación de Perú en Catad’Or es producto del incansable trabajo que realiza Pedro Cuenca, quien dirige Perú Hace Vino, el concurso nacional Catemos Perú y el Salón del Vino Peruano. También del apoyo de los organizadores del concurso Catad’Or, enfocados en conseguir menores costos logísticos, lo que permitió la presencia de bodegas de pequeña y mediana producción. Para que tengan la referencia: registrar cada muestra en la competencia requiere una inversión de US$130 por cada vino que se presenta, este valor no incluye impuestos ni costos de aduana.

La edición 30ª de Catad’Or también sirvió para la competencia entre espirituosos y destilados de varios países. En la categoría de Mejor Vermut el premio se lo llevó Vermouth Avelino Rojo de la empresa peruana Compañía de Espirituosos Andinos.

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