LA PULPERÍA LIMEÑA

Foto Difusión.

Escribe Melina Bertocchi (@melbertocchi)

En los últimos dos años, los locales “boutique” con productos auténticos, de poco volumen, donde te atiende el dueño y te sientes como en casa, van en franco aumento. Y el pequeño local de la esquina 999 de la calle Chiclayo, es un buen ejemplo.

Carlos Gonzalez López de Lemus llegó a Lima hace más de una década. Casado con peruana a quien conoció cuando vivía en Nueva York, su recorrido de vida ha sido todo menos común. Originario de Sevilla, tierra de gran tradición gastronómica en España, viene de una familia muy numerosa de varios hermanos, ninguno de los cuales se ha separado de Europa ni de su tierra natal. “Los sevillanos somos muy pegados a la tradición y a la gente allá le cuesta imaginar que hay algo mejor. Valoramos mucho la buena mesa y el buen beber”, asegura Carlos.

Eso es fácil de comprobar al visitar La Pulpería. Un espacio simple, cálido, que a primera vista parece tener pocas cosas o lo justo. Todo cambia a medida que uno busca, se acerca a los estantes o a la nevera donde se luce el jamón, el chorizo o el lomo ibérico, así como el clásico queso de oveja Flor de Esgueva. Eso es suficiente para que te ofrezcan un trozo, y es mejor si lo prueban con las regaña, típicas galletas sevillanas que prepara el mismo Carlos en su casa los fines de semana. Crujientes, secas, bajas en sal. La receta parece simple (harina, agua, sal y levadura), pero lo complejo es el amasado, lograr la forma y el punto de crocante.

Algo que miré con incredulidad y luego me sorprendió fue una mezcla lista para preparar de tortilla de patatas con cebollas. Para una cena rápida en casa es ideal. Solamente hay que agregar huevos, batir y echar en la sartén. No necesita ni sal. Otro descubrimiento feliz fueron las tortas de aceite de Inés Rosales. Son el pan de cada día en Sevilla y Carlos las trae hasta Lima. Esta suerte de galleta al aceite de oliva es hecha de forma artesanal con harina, azúcar, sésamo y granos de anís que le aportan un aroma especial.

Pero además de lo español en su selección, Carlos es un explorador de productos peruanos. Viaja, conoce y trae delicias de varias zonas, como una sal rosada de la zona de San Martín que es desconocida para la mayoría y pronto espera tener con su etiqueta en la tienda. Chocolates de origen, tampoco faltan. Cuando fui a la tienda tenían en una cesta sobre el mostrador, bocadillos de jamón y chorizo ibérico a S/. 3.50.

La Pulpería. Calle Chiclayo 999, Miraflores / Teléfono: 242-3653 / www.lapulperia.com.pe

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