TEXTILES PERUANOS INSPIRAN LA NUEVA CARTA DEL BAR SASTRERÍA MARTÍNEZ
El bar oculto de Miraflores celebra su tercer aniversario con coctelería que rinde homenaje a nuestro milenario arte textil.
El bar oculto de Miraflores celebra su tercer aniversario con coctelería que rinde homenaje a nuestro milenario arte textil.
Escribe Daniel Quintero (IG @danielquintero) / Fotos Jimena Agois (IG @jimena.agois)
Sastrería Martínez celebró hace unas semanas su tercer aniversario con una propuesta que nuevamente utiliza la sastrería como hilo conductor. La primera carta fue una guía de materiales, la segunda una de estilos de trajes y, en esta ocasión, una muestra de telas utilizando tejidos peruanos.
El equipo liderado por el bartender Diego Macedo desarrolló esta carta inspirada en la diversidad textil del Perú. Una propuesta que traduce patrones, fibras y territorios en cócteles. Dividida en tres capítulos, Costa, Sierra y Selva, cada sección rinde homenaje a una región del país mediante ingredientes locales. La sección de la Costa comienza marcada por un papel hecho con pieles de uva representando al pisco. Abre la selección el Mrs. Martínez, un clásico de Sastrería Martínez: este aperitivo es una versión cítrica y elegante del Martínez, hecho con gin, amaro infusionado con fresas, vermú italiano, arándanos y limón mandarino. Le acompañan cinco cócteles más, como el Índigo, con gin, licor de pacae, licor de naranjas, lactofermento de manzanas y bitter de manzanilla.

En Sierra, el capítulo comienza con una hoja hecha con carbón, representando el suelo volcánico de nuestra sierra arequipeña, por ejemplo. Pero el recorrido se extiende por toda la cordillera andina. El Misminay se inspira en la comunidad cusqueña del mismo nombre, es un cóctel refrescante y spirit foward con gin, cordial de acerola, sanki, muña andina y limoncello. Este acompaña otros cinco cócteles, como el Tuti, que es más afrutado, usando pisco mosto verde Italia, licor de mucílago de cacao y aguaje, mermelada de tumbo y rocoto, tumbo, soda de muña y toronjil.
La página que identifica a la Selva tiene la textura de la piel del paiche. Esta sección tiene cócteles como el Kené, que es semiseco basado en ron con fatwash de castaña de Madre de Dios, destilado de cítricos amazónicos, un blend de vermú blancos al mamey, mucílago de cacao y bitter de macambo, servido sobre un lienzo blanco y negro que replica el patrón gráfico de las comunidades Shipibo-Conibo. Este es también uno de los seis cócteles que forma parte de la colección.
Además de los 18 cócteles de autor, la carta cuenta con una sección de ocho cócteles icónicos, que según explica Macedo son los más vendidos desde el lanzamiento del bar. También hay 12 cócteles clásicos y una sección de “Descocidos”, con cinco cócteles sin alcohol utilizando destilados desalcoholizados en casa o desde el origen.

La narrativa estética se mantiene coherente: los nuevos uniformes del equipo llevan detalles bordados inspirados en los kené amazónicos. El espacio presenta semanalmente actividades como música en vivo con diferentes grupos de jazz y, una vez al mes, colaboraciones que denominan “Contrabando”, donde cocineros o bartenders se unen para hacer cartas especiales.

Para darle los últimos toques a la experiencia sartorial, y en alianza con Sastrería Firenze (un atelier de confecciones a medida), desde este mes de setiembre se ofrecerá a los clientes de Sastrería Martínez la posibilidad de solicitar confecciones especiales: trajes de corte clásico y contemporáneo, camisas personalizadas, chaquetas sport y blazers para el día a día, además de pantalones elaborados con telas italianas e inglesas, junto a una colección de accesorios, como corbatas y pañuelos.
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