LA CRISTINA, TODO EL DÍA CASERO

Escribe Ketty Cadillo (IG @kettycadillo)

Entre la calle Coronel Odriozola y la avenida Petit Thouars, en San Isidro, se encuentra La Cristina, un espacio creado para engreír al comensal con comida hecha con sabor de hogar. Que además tiene market y una panadería que ofrece, entre todos sus productos, uno de los mejores croissants de Lima. Hoy La Cristina, desde el desayuno y con almuerzos caseros, se ha convertido en la engreída del barrio

La Cristina. Market habilitado con los mejores croissants.

Hace dos años, en plena pandemia, La Cristina abrió sus puertas. Comenzó bajo el concepto de bakery y, con el tiempo, tras el aumento de la demanda, se ha transformado en un lugar que ofrece, además de una panadería y un market, un espacio para degustar un menú diario, donde la comida con sabor a casa es la que reina.

La Cristina. Lentejitas con panceta, uno de los platos del día para sentirse como en casa.

Ahí se lucen, entre varias opciones, las lentejas con panceta, además de pastas como los ravioles de la suerte, hechos en base a espinaca, ricota, mantequilla y salvia o pomodoro. Hay también asado con cremosa polenta o pollo en varias presentaciones y varios tipos de pizzas, todo hecho al momento en una cocina dirigida por el chef Carlos Vidal. “Todo esto comenzó como un bakery de alto nivel y poco a poco se ha ido ampliando. En la pandemia se abrió el market como un complemento y con el tiempo llegó el restaurante. Todo junto, en un mismo espacio, que apuesta por la calidad y que tiene un gran equipo profesional y humano detrás, donde destaca la asesoría de Renato Peralta”, señala Jimena Larrea, la chef que lleva las riendas del emprendimiento.

La Cristina. Panceta braseada. La Cristina ha logrado, gracias a su ubicación, hacerse de consumidores frecuentes y variados.

LO COTIDIANO QUE SUMA

A la panadería, suelen llegar temprano los vecinos del barrio; mientras que el restaurante, a media mañana, está lleno de personas que acuden por reuniones de trabajo o para picar algo rico y con sabor hogareño. A la hora del almuerzo, son los trabajadores de las diversas empresas quienes ocupan sus mesas. Mientras que, para la cena, con la luz baja y velas, genera el mood ideal para comer algo rico antes de ir a casa. “Nuestra comida es casera y confortable. Buscamos que nuestros comensales sientan que están disfrutando de un plato hecho en casa. Para llegar a esto, nos hemos enfocado en usar buenos insumos y preparar todo aquí, en nuestra área se producción, lo que nos permite controlar al milímetro la calidad de lo que ofrecemos cada día”, afirma Larrea.

El croissant de La Cristina es tema aparte y se ha convertido en un producto por el que muchos amantes de este tipo de pan realizan una especie de peregrinaje al local todos los días. Preparado con base mantequilla de la mejor calidad, entre otros insumos, este producto se ha convertido en el sello de la panadería. Y su factura se ha extendido a una línea de bollería que se renueva cada tanto. No dejen de probar el pain au chocolat y estén atentos a las novedades de cada temporada.